DIARIO DE VIAJE
Hoy vamos a visitar la parte antigua de Chiang Mai ¡En bici!
El alquiler nos ha salido por 40 baht a cada uno (1€) el día. (y 1000 bath de fianza por bici).
Yo hacía unos 11 años que no montaba en bici, por lo que nos fuimos a un pequeño parque a practicar un poquito.
Lo de montar en bici ¡no se olvida! (pero con la locura de tráfico que hay en Tailandia vas con el culo prieto).

Nuestra primera parada ha sido en el Silver Temple, un pequeño templo de color plata.


Hay que indicar que me quedé sin poder entrar, pues el paso no estaba permitido a las mujeres. Mi cara lo dice todo.

Antes de seguir viendo templos, pasamos por el jardín de terracota. Es un lugar pequeñito, pero podrás encontrar decenas de pequeñas estatuas y decoraciones de arcilla. La mayoría rotas por el tiempo y apiladas unas encima de otras. Un local, nos estuvo enseñando como hacen las decoraciones a mano, y hablándonos un poco acerca del trabajo que lleva realizarlas.

Volvimos a montar en nuestra bici para visitar el Wat Chedi Luang, o lo que queda de él, pues parte fue destruido en un terremoto en 1545.

Allí tuvimos la oportunidad de sentarnos a charlar con un monje sobre el budismo y su cultura. Son monjes que se encuentran estudiando, y a cambio de sus conocimientos, ellos pueden practicar inglés con nosotros.
Antes de ir a comer, pasamos por la plaza de los tres reyes, y fuimos a reservar en “Flight of the Gibbon“, una experiencia con tirolinas que queremos hacer estos días.
Comimos en una plaza cerca y sin reposar la comida, nos pusimos en marcha de nuevo para ver el Wat lok molee y el Wat chiang man, el templo más antiguo de Chiang Mai y en el que tampoco pude entrar.

Cansados del largo día en bici, paramos a tomarnos un “fruit shake” en Funky monkey coffee y a cenar al mercado de comida nocturno (donde me pusieron el arroz más picante desde que he llegado).
Devolvimos las bicis y… a dormir prontito que mañana ¡nos espera un gran día!