DIARIO DE VIAJE
Hoy estábamos dispuestos a pasar el día grabando tomas en esta carretera.
Sinceramente, es una de las cosas que más nos apetecía ver en Noruega.
Pero también tenemos que decir que, al menos a nosotros, nos decepcionó bastante.
La carretera del atlántico es de esas típicas cosas que ves en fotos e impresionan un montón, pero que luego no son para tanto.
Es una carretera muy chula, diferente a lo que estamos acostumbrados a ver, pero como suele pasar, en las fotos parece mucho más curva y más grande.
Aún así, las vistas eran muy bonitas. Grabamos varias tomas y pudimos disfrutar de un atardecer precioso.


Si vais a verla, el atardecer creemos que es el mejor momento.

Pasamos la noche cerca.
…
Por la mañana nos toca carretera.
Tenemos que llegar hasta Bodø, pues desde allí sale el ferry a las islas de Lofoten.
Pasamos varias horas en la carretera.

Incluso llegamos al ‘Arctic Circle Center’


Se nos hace tarde para continuar, así que paramos a unos minutos de entrar en ‘Nordland’

…
Al día siguiente, pasamos la mañana en carretera y llegamos por la tarde. Pensamos que ya no cogeríamos ningún ferry. Fuimos a ver los horarios y vimos que a las 00:15 de esta noche salía uno.

Así que, vamos a coger ese. Así mañana ya despertamos en las islas.
Nos toca esperar bastante, pues son como las siete de la tarde, pero vemos alguna serie y en seguida llegó la hora.
El ferry nos costó 97 Nok que son unos 100€.
Lo malo es que no nos dejan quedarnos en la furgo, es obligatorio subir a arriba. Y no nos dejan subir con Pupi. Nos da mucha pena porque son cuatro horas de viaje, pero tampoco tenemos más opción.
Dejamos a Pupi en la camita, con su comida, agua y su mosqueo.
Nunca habíamos montado en un ferry de estos, es muy grande. Un montón de asientos, bar, baños. Pero al ser tan tarde, no tienen servicio de nada.


El viaje se hace un poco pesado, ¡cómo se mueve!
Yo ya tenía un mareo con tanto bote, que al final me termino echando en el suelo.
Al fin llegamos. Bajamos a la furgo, Pupi nos regaña un buen rato y ¡salimos!
Paramos en el primer sitio que encontramos para dormir, ¡qué sueño!