DIARIO DE VIAJE
Después de haber pasado un día de relax (ya hacía falta), toca ponerse en marcha.
Hace un sol expléndido para hacer fotos, así que vamos a pasar el día viendo templos.
Como ya vimos en Kanchanaburi, la moto nos hizo ahorrar mucho tiempo y dinero, por lo que hemos vuelto a alquilar (se le coge el gustillo rápido a la moto).

Nuestro primer destino ha sido la estación de autobuses de Ayutthaya, y os explico por qué:
Mañana queremos marchar hacia Chiang Mai, y en casi todos los sitios te venden packs turísticos.
Autobús+tuctuc 800 Baths/persona (Unos 20€)
Sin embargo el mismo billetee de autobús compradoe en la estación 500 Baths/persona (unos 12,5€).
Entre los dos nos ahorramos unos 15€. Es una experiencia ir buscándote la vida y ver que si te lo curras un poquito van disminuyendo las “turistadas”.
Después de la parada informativa, fuimos a ver los templos:
Wat Yai Chai Mongkhon Nos costó 20 Baths a cada uno (1€ entre los dos)



Wat Phanan Choeng Tiene un gran buda de 19 metros, dentro de una sala de oración, en la que apenas pudimos echar fotos por la cantidad de gente que había. Es domingo y aquí también es el día “del señor”. (No hay que pagar entrada).
Wat Phu Khao Thong. Es el templo más alejado de la ciudad que visitamos y se notaba. Estábamos prácticamente solos, y así es una maravilla pasearte por los templos. (No hay que pagar entrada).

Wat lokayasutharam. Otro de los grandes Budas reclinados. 37m de largo, por 7 metros de alto. (No hay que pagar entrada).

Wat Phra Mahthat. Aquí podréis ver la cabeza de buda entre las ramas. Nos costó 50 Baths a cada uno. Cuando los Birmanos entraron en Ayutthaya destruyeron todos los budas. En este Templo al cortarle la cabeza a una estatua de Buda, ésta rodo y las raices de este arbol crecieron en torno a ella “protegiendolo”.


Wat Chaitthanaram. Patrimonio de la Unesco desde 1991. Nos costó también 50 Baths a cada uno, pero merecieron la pena para ver allí el atardecer, con un gran Sol rojo. Una maravilla.



Llevamos unas 10 horas de trote y estamos acabados.
Devolvimos la moto en “Good Luck” y nos pegamos un merecido bañito en la piscina.
